El estado de Alabama, en EE.UU., aprobó una de las leyes más severas contra la inmigración de indocumentados en todo el territorio del país.
Exige a todas las escuelas determinar si sus estudiantes están en el país legalmente y convierte en delito ofrecer transporte o vivienda a cualquiera que esté sin documentos en regla en EE.UU.
La policía también podrá arrestar a cuelquiera que sea sospechoso de no tener documentos migratorios en regla, incluso si son detenidos por otras razones.
Grupos defensores de derechos civiles indicaron es en su espíritu racista e inconstitucional.
Sin embargo, el gobernador de Alabama, el republicano Robert Bentley, indicó que hará que haya más trabajos disponibles para aquellos que se encuientran en situación legal.
(Tomado de BBC Mundo)
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