* Utilización de suelos rurales baldíos propiedad del Estado para la producción alimentaria propone Encuentro Campesino en Usme.
El nutrido Encuentro Campesino de la ruralidad de Bogotá, realizado en la Localidad de Usme, respaldó la propuesta de la creación de las Zonas de Reserva Campesina como alternativa para el suministro sano y abundante de alimentos con destino a las zonas urbanas y como posibilidad para incrementar la producción, disminuir los precios de los mismos, garantizar ingresos a los campesinos y mejorar la calidad de vida tanto de los habitantes urbanos como rurales.
Al encuentro asistieron representantes de diversas organizaciones y comunidades campesinas provenientes de la mayoría de las localidades de Bogotá que poseen zonas rurales como Suba, Engativá, Chapinero, Sumapaz, Usme, San Cristóbal, Ciudad Bolívar y Rafael Uribe Uribe. Entre las propuestas más interesantes está la de destinar los suelos rurales baldíos o improductivos que se encuentren en manos del Distrito con miras a que grupos de campesinos, bajo diversas formas de asociación, los empleen para la producción intensiva de alimentos con base en agricultura limpia o agroecológica. Para ello propusieron al Distrito la realización de un censo de tierras disponibles y la preparación de las normas requeridas para que este proceso pueda darse.
Convenio militar con E.U.,patente de corso para violar soberanía del pueblo colombiano
· En virtud de la decisión inconsulta de Uribe, ahora los colombianos quedamos al albedrío norteamericano gracias a nuestro propio gobierno y lo que es aún más insultante, en nuestro propio país.
El Partido Comunista Colombiano, integrante del Polo Democrático Alternativo, elevó su protesta por la suscripción a espaldas del país del acuerdo militar entre los gobiernos de Álvaro Uribe y Barak Obama y señaló que en realidad se trata de una patente de corso para que los militares norteamericanos, sus familias y los contratistas civiles de ese país ejerzan actividades en Colombia sin atender las leyes nacionales, poniendo en grave riesgo la seguridad nacional y la de la sociedad colombiana en su conjunto.
“Es inadmisible que el gobierno de Uribe no sólo haya cedido sin contraprestación alguna buena parte del territorio nacional, con promesas de que podrá seguir otorgando todavía más prebendas a los invasores norteamericanos, sino que además incurre en flagrantes violaciones a la Constitución colombiana, perfectamente denunciadas por el Consejo de Estado a través del concepto emitido y que el país hoy conoce”, dice la declaración del Partido Comunista Colombiano.
“Ahora resulta que el concepto apátrida de la “confianza inversionista”, que le ha costado a las finanzas nacionales varios billones de pesos por cuenta de las exenciones a los grandes capitales multinacionales, en desmedro del presupuesto nacional, se adiciona a la violación de la soberanía y se extiende para eximir a los Estados Unidos de cualquier pago por el uso de bienes que le pertenecen al Estado colombiano, incluidos aeropuertos, puertos marítimos, carreteras nacionales, el espectro radioeléctrico, edificaciones, servicios públicos y otros apoyos. El señor Uribe Vélez está convencido de que puede usar y feriar a su antojo los bienes que le pertenecen a todos los colombianos y pretende no dar cuenta de ello evadiendo los controles del Congreso de la República y de la Corte Constitucional”. Siga..
· En virtud de la decisión inconsulta de Uribe, ahora los colombianos quedamos al albedrío norteamericano gracias a nuestro propio gobierno y lo que es aún más insultante, en nuestro propio país.
El Partido Comunista Colombiano, integrante del Polo Democrático Alternativo, elevó su protesta por la suscripción a espaldas del país del acuerdo militar entre los gobiernos de Álvaro Uribe y Barak Obama y señaló que en realidad se trata de una patente de corso para que los militares norteamericanos, sus familias y los contratistas civiles de ese país ejerzan actividades en Colombia sin atender las leyes nacionales, poniendo en grave riesgo la seguridad nacional y la de la sociedad colombiana en su conjunto.
“Es inadmisible que el gobierno de Uribe no sólo haya cedido sin contraprestación alguna buena parte del territorio nacional, con promesas de que podrá seguir otorgando todavía más prebendas a los invasores norteamericanos, sino que además incurre en flagrantes violaciones a la Constitución colombiana, perfectamente denunciadas por el Consejo de Estado a través del concepto emitido y que el país hoy conoce”, dice la declaración del Partido Comunista Colombiano.
“Ahora resulta que el concepto apátrida de la “confianza inversionista”, que le ha costado a las finanzas nacionales varios billones de pesos por cuenta de las exenciones a los grandes capitales multinacionales, en desmedro del presupuesto nacional, se adiciona a la violación de la soberanía y se extiende para eximir a los Estados Unidos de cualquier pago por el uso de bienes que le pertenecen al Estado colombiano, incluidos aeropuertos, puertos marítimos, carreteras nacionales, el espectro radioeléctrico, edificaciones, servicios públicos y otros apoyos. El señor Uribe Vélez está convencido de que puede usar y feriar a su antojo los bienes que le pertenecen a todos los colombianos y pretende no dar cuenta de ello evadiendo los controles del Congreso de la República y de la Corte Constitucional”. Siga..
''Con este acuerdo militar Colombia ha entregado su soberanía a Estados Unidos''
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que con el acuerdo firmado el pasado viernes entre Bogotá y Washington, Colombia ha entregado la soberanía de su país, restando importancia a la lucha que hace 200 años emprendieron las "fuerzas libertadoras bajo el mando de Simón Bolívar".
El canciller venezolano, Nicolás Maduro, afirmó que con el acuerdo firmado el pasado viernes entre Bogotá y Washington, Colombia ha entregado la soberanía de su país, restando importancia a la lucha que hace 200 años emprendieron las "fuerzas libertadoras bajo el mando de Simón Bolívar".
En entrevista exclusiva a teleSUR, Maduro señaló que ante los ataques que puedan sufrir las naciones suramericanas como consecuencia de una injerencia estadounidense, el gobierno venezolano aplicará la estrategia de decir siempre la verdad; "denunciarla y que Suramérica, como un todo, reaccione y se prepare desde el punto de vista político para neutralizar estas amenazas (...) En este momento callar esta verdad, disimularla, taparla, más que cobardía es complicidad, en este momento de la historia".
El ministro de Relaciones Exteriores también habló sobre la situación actual de Honduras e indicó que la comunidad internacional ha visto como se ha burlado el acuerdo que exigía la restitución inmediata del presidente Manuel Zelaya; sin embargo dijo que Venezuela tiene fe en el pueblo hondureño que seguirá en su lucha para la restitución de la democracia y unas elecciones limpias.
En el diálogo, conducido por la periodista Patricia Villegas, Nicolás Maduro también hizo mención de las denuncias sobre espionaje que el gobierno colombiano ha llevado a cabo en Venezuela con operaciones estratégicas. Siga..
Suman 13 muertos por balacera en base militar en Estados Unidos
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Janet Napolitano, aseguró que la tragedia es más difícil de asimilar al haber afectado a soldados que estaban en suelo estadounidense.
Autoridades estadounidenses informaron este viernes que se incrementó a 13 el número de muertos tras in tiroteo en la base militar de Fort Hood, en Texas. Siga..
Autoridades estadounidenses informaron este viernes que se incrementó a 13 el número de muertos tras in tiroteo en la base militar de Fort Hood, en Texas. Siga..
Convenio militar con E.U.,patente de corso para violar soberanía del pueblo colombiano
· En virtud de la decisión inconsulta de Uribe, ahora los colombianos quedamos al albedrío norteamericano gracias a nuestro propio gobierno y lo que es aún más insultante, en nuestro propio país.
El Partido Comunista Colombiano, integrante del Polo Democrático Alternativo, elevó su protesta por la suscripción a espaldas del país del acuerdo militar entre los gobiernos de Álvaro Uribe y Barak Obama y señaló que en realidad se trata de una patente de corso para que los militares norteamericanos, sus familias y los contratistas civiles de ese país ejerzan actividades en Colombia sin atender las leyes nacionales, poniendo en grave riesgo la seguridad nacional y la de la sociedad colombiana en su conjunto.
“Es inadmisible que el gobierno de Uribe no sólo haya cedido sin contraprestación alguna buena parte del territorio nacional, con promesas de que podrá seguir otorgando todavía más prebendas a los invasores norteamericanos, sino que además incurre en flagrantes violaciones a la Constitución colombiana, perfectamente denunciadas por el Consejo de Estado a través del concepto emitido y que el país hoy conoce”, dice la declaración del Partido Comunista Colombiano.
“Ahora resulta que el concepto apátrida de la “confianza inversionista”, que le ha costado a las finanzas nacionales varios billones de pesos por cuenta de las exenciones a los grandes capitales multinacionales, en desmedro del presupuesto nacional, se adiciona a la violación de la soberanía y se extiende para eximir a los Estados Unidos de cualquier pago por el uso de bienes que le pertenecen al Estado colombiano, incluidos aeropuertos, puertos marítimos, carreteras nacionales, el espectro radioeléctrico, edificaciones, servicios públicos y otros apoyos. El señor Uribe Vélez está convencido de que puede usar y feriar a su antojo los bienes que le pertenecen a todos los colombianos y pretende no dar cuenta de ello evadiendo los controles del Congreso de la República y de la Corte Constitucional”. Siga..
· En virtud de la decisión inconsulta de Uribe, ahora los colombianos quedamos al albedrío norteamericano gracias a nuestro propio gobierno y lo que es aún más insultante, en nuestro propio país.
El Partido Comunista Colombiano, integrante del Polo Democrático Alternativo, elevó su protesta por la suscripción a espaldas del país del acuerdo militar entre los gobiernos de Álvaro Uribe y Barak Obama y señaló que en realidad se trata de una patente de corso para que los militares norteamericanos, sus familias y los contratistas civiles de ese país ejerzan actividades en Colombia sin atender las leyes nacionales, poniendo en grave riesgo la seguridad nacional y la de la sociedad colombiana en su conjunto.
“Es inadmisible que el gobierno de Uribe no sólo haya cedido sin contraprestación alguna buena parte del territorio nacional, con promesas de que podrá seguir otorgando todavía más prebendas a los invasores norteamericanos, sino que además incurre en flagrantes violaciones a la Constitución colombiana, perfectamente denunciadas por el Consejo de Estado a través del concepto emitido y que el país hoy conoce”, dice la declaración del Partido Comunista Colombiano.
“Ahora resulta que el concepto apátrida de la “confianza inversionista”, que le ha costado a las finanzas nacionales varios billones de pesos por cuenta de las exenciones a los grandes capitales multinacionales, en desmedro del presupuesto nacional, se adiciona a la violación de la soberanía y se extiende para eximir a los Estados Unidos de cualquier pago por el uso de bienes que le pertenecen al Estado colombiano, incluidos aeropuertos, puertos marítimos, carreteras nacionales, el espectro radioeléctrico, edificaciones, servicios públicos y otros apoyos. El señor Uribe Vélez está convencido de que puede usar y feriar a su antojo los bienes que le pertenecen a todos los colombianos y pretende no dar cuenta de ello evadiendo los controles del Congreso de la República y de la Corte Constitucional”. Siga..
Un Acuerdo contra el país
ResponderEliminarPor Rodrigo López Oviedo
Buena maña se dieron los negociadores del Acuerdo que comprometió a Colombia a permitir que Estados Unidos utilizara siete de nuestras bases militares y otras más. Buena maña para que su redacción fuera suficientemente clara respecto de los beneficios concedidos al país del norte y enmarañada en cuanto a los propósitos de fondo.
Obsérvese que lo que se suponía iría a ser un acuerdo contra el terrorismo y el narcotráfico y estaría circunscrito a lo que pudiera hacerse dentro de nuestras fronteras, terminó siendo un “Acuerdo complementario para la Cooperación y la Asistencia Técnica en Defensa y Seguridad”, inspirado en la intención de “fortalecer la relación estratégica de seguridad entre las Partes” y de “enfrentar las amenazas comunes a la paz, la estabilidad, la libertad y la democracia”.
Obsérvese también que al hablar de defensa, de seguridad, de paz, de estabilidad, de libertad y de democracia se estuvieron tratando temas mayores, con los cuales se rebasaron los publicitados propósitos antinarcóticos y antiterroristas y nos dejaron casados con el bando estadounidense para cuando quiera que se presenten fenómenos tan espinosos como los que se esconden detrás de esas comprometedoras palabras. Se trata realmente de una patente de corso, con la cual se protocoliza la entrega de una parcela más de nuestra soberanía y se siguen despertando justificadas alarmas en el vecindario latinoamericano y del Caribe.
Salvo una cláusula que obliga al ejército estadounidense a rendirles a nuestros militares las debidas cortesías cuando quiera que por razones del Acuerdo traspasen sus fronteras, son los norteamericanos los únicos favorecidos en todas las esencias generales del Acuerdo, pero también en las particulares, ya que les individualiza a sus operadores un sinnúmero de derechos: el de la inmunidad penal; el de la exoneración del pago de tasas, aranceles y tributos; el de la liberación de la obligación de permitir la inspección de sus equipos de transporte y de los bienes que estén incluidos en sus declaraciones de aduana y el del otorgamiento de visas preferenciales además de un largo etcétera. Y si algunos operadores quedaron exceptuados de tantos privilegios, ellos son los colombianos que trabajarán con el Acuerdo.
Rechazo especial merece el que la presencia de estos operadores no se considerará residencia o domicilio en Colombia, lo cual significa que los ingresos económicos que aquí perciban no estarán sometidos a ningún gravamen. Y también, el que el Acuerdo les concede Autorización para que establezcan estaciones receptoras y difusoras de radio y televisión por satélite, sin necesidad de licencias y sin que ello genere costos para Estados Unidos.
Una de las mayores críticas que antecedieron al Acuerdo estaba relacionada con lo tardíos que resultarían para Colombia los informes sobre las operaciones realizadas. En respuesta, el Gobierno manifestó que, al contrario, los procedimientos se diseñarían de tal forma que podría conocer de tales operaciones en tiempo real. Pues la razón terminaron teniéndola los críticos, pues el Acuerdo dice que las partes operativas “podrán” presentar a sus gobiernos un informe de las labores realizadas, logros alcanzados y recomendaciones con una periodicidad… ¡anual! Es decir, que ni siquiera “tendrán” que presentarlos, y en caso de hacerlo, lo harán cuando ya todo pataleo resulte inútil.
Ante semejante Acuerdo, cualquier país digno llevaría ante los tribunales a un gobernante que tan vergonzosamente se entrega a intereses extranjeros.