Un soldado colombiano vigilaba la frontera con Ecuador en el departamento de Nariño, Colombia, el año pasado. Credit Fredy Builes/Reuters. |
Por: Nicholas Casey
El comandante del ejército de Colombia, frustrado por los vacilantes esfuerzos de la nación para preservar la paz, les ha ordenado a sus tropas que dupliquen la cantidad de criminales y rebeldes que matan, capturan u obligan a rendirse en batalla; y posiblemente acepte un aumento de las bajas civiles en el proceso, según consta en órdenes escritas y entrevistas con altos oficiales.